¿Cuándo nacieron los tapizados de tela en los autos?

Desde los primeros días de la industria automotriz, los materiales utilizados en los asientos han evolucionado considerablemente. En sus inicios, a finales del siglo XIX y principios del XX, los autos eran considerados un lujo, por lo que sus interiores solían estar tapizados con cuero genuino o materiales similares. Estos acabados proporcionaban una apariencia elegante y eran relativamente fáciles de limpiar, aunque su costo era elevado y su mantenimiento, complejo.

Con la masificación del automóvil a partir de la década de 1920, las compañías comenzaron a buscar opciones más accesibles y cómodas para los usuarios. Fue entonces cuando aparecieron los primeros asientos de tela, principalmente en vehículos de gama media y baja. Durante los años 40′ y 50′, este tipo de tapizado se volvió más común gracias a la disponibilidad de nuevas fibras textiles y técnicas de fabricación más eficientes.

El verdadero auge de los asientos de tela llegó en las décadas de 1960 y 1970, cuando los fabricantes introdujeron materiales sintéticos como el nylon y el poliéster. Estos tejidos ofrecían mayor resistencia, variedad de diseños y colores, y un menor costo en comparación con el cuero. Además, eran más transpirables, lo que mejoraba la comodidad en climas cálidos.
Asiento de cuero
En los años 80′ y 90′, la tecnología textil avanzó aún más, dando lugar a telas más duraderas y resistentes a las manchas. Modelos de autos más económicos comenzaron a incluir asientos con combinaciones de tela y vinilo, mientras que las opciones de lujo seguían utilizando cuero o materiales de alta gama.

Actualmente, los asientos de tela siguen siendo una opción popular en muchos vehículos, con materiales avanzados como la microfibra y los tejidos hidrofóbicos, que repelen líquidos y mejoran la durabilidad. Aunque el cuero sigue siendo un símbolo de exclusividad, la tela ha demostrado ser una alternativa versátil, cómoda y accesible para millones de conductores en todo el mundo. 

Fuente: Parabrisas